La riqueza natural tanto de la capital como de la provincia hacen de Cuenca un lugar ideal para disfrutar de los meses de verano. Junto a la singular belleza de un sinfín de espacios, encontramos algunas playas y zonas de baño continentales en las que mitigar el calor veraniego.
En Cuenca, según los datos del Sistema de Información Nacional de Aguas de Baño, encontramos 8 zonas naturales calificadas como aptas para el baño y de acceso libre.
Embalse de Buendía
En las estribaciones de la Alcarria conquense, a caballo entre las provincias de Cuenca y Guadalajara, el embalse de Buendía es una de las principales áreas de recreo de la zona. Esta masa artificial de agua tiene catalogadas como aptas para el baño dos zonas. Además, es un punto de especial atractivo para los amantes de la pesca. En el mismo espacio, en las orillas del pantano, se puede recorrer la denominada Ruta de las Caras, un trazado señalizado de poco más de un kilómetro que nos acerca a conocer una veintena de esculturas y bajorrelieves esculpidas en las rocas areniscas. Si estás interesado en visitar este lugar, aquí podéis descargar el folleto informativo de la Ruta de las Caras de Buendía.
El río Guadiela, en Albendea
Donde la Alcarria se convierte ya en Serranía, hacia la mitad del camino de la carretera que une Priego con Alcantud, las claras aguas del río Guadiela nos ofrece otro punto de baño natural a pocos kilómetros de su nacimiento, cerca de la localidad de Cueva del Hierro.
La laguna de El Tobar, en Beteta
Muy cerca de Beteta, la laguna de El Tobar es un espacio de reconocido valor ecológico por la riqueza de aves acuáticas que lo habitan. Además, la belleza del entorno y la tranquilidad de sus aguas lo concierten en un lugar ideal para disfrutar de un baño.
El río Escabas, en Cañamares
Junto a la localidad de Cañamares, en el inicio de la carretera que lleva hasta Fuertescusa, hay habilitada una zona de baño natural. La cercanía a Cañamares y a la zona recreativa de El Barco hace que este espacio este muy concurrido durante los meses de verano.
El embalse de la Toba, en Cuenca.
En la carretera que une la capital con el Nacimiento del Río Cuervo, poco después de pasar por la localidad de Uña, encontramos el embalse se la Toba. Escoltado por pinares y los grandes farallones de roca característicos de la Serranía de Cuenca, La Toba es uno de las zonas más visitadas en esta época del año por su comodidad de acceso para el baño y las múltiples actividades que se pueden realizar en ella.
El río Cuervo, en Santa María del Val.
Las frias aguas del río Cuervo son un lugar ideal para refrescarse en estos meses. A pocos kilómetros de su nacimiento, en el corazón de la Serranía de Cuenca, podemos disfrutar de una zona apta para el baño muy cerca de la localidad de Santa María del Val. Desde este punto, también es posible pasear hasta el embalse de La Tosca o, incluso, llegar hasta la cercana laguna de El Tobar siguiendo un sendero señalizado.
El Chantre
Por su cercanía y por la comodidad de la zona, El Chantre es uno de los puntos preferidos por muchos conquenses para disfrutar de la naturaleza. A 10 kilómetros de la capital, junto a la carretera CM-2105 que conduce hasta la Serranía, una amplia explanada provista de una zona recreativa permite aparcar con comodidad y disfrutar de un buen tramo del río Júcar.
Si estás interesados en conocer más detalles de estas zonas de baño naturales (ubicación exacta, resultado de los análisis, etc…) puedes acceder a la web del Sistema Nacional de Aguas de Baño. Además de los puntos de los que hemos hablado, se ofrece información de todas las zonas de España.