Enclavada en el corazón de la Serranía de Cuenca, la localidad de Las Majadas se ha convertido en una de las puertas de acceso a algunos de los lugares de especial atractivo de la zona. Muy cerca de ella, se localiza uno de estos espacios singulares: Los Callejones de Las Majadas.
Se trata de un conjunto de formaciones kársticas de gran interés geomórfico que se localiza a apenas tres kilómetros del núcleo urbano. En él, como también ocurre en la Ciudad Encantada de Cuenca, se pueden ver las caprichosas formas que han adoptado las rocas calizas por la acción del agua, el hielo, el viento y las variaciones térmicas.
Y es que el origen de Los Callejones de Las Majadas coincide con el de la Ciudad Encantada. Hace 90 millones de años, la zona estaba ocupada por el mar de Thetis, en cuyo lecho se fueron depositando diversos materiales que conformaron rocas de origen calcáreo. Durante la época de formación
de las montañas, el agua se retiró y dejó a la vista las piedras calizas que hasta entonces habían formado parte del fondo marino.
de las montañas, el agua se retiró y dejó a la vista las piedras calizas que hasta entonces habían formado parte del fondo marino.
Desde entonces, este lapiaz (conjunto de acanaladuras y oquedades que oscilan entre los pocos centímetros y varios metros de longitud y profundidad) ha ido evolucionando pasando por tres etapas que nos resume uno de los carteles informativos que hay a la entrada del recinto.
En un primer momento, el agua circula sobre las dolomías -que están formadas por carbonato cálcico y magnesio- agrandando las fracturas existentes. En este proceso de disolución se crean surcos alargados con la misma dirección.
Con el tiempo, estos surcos se van ensanchando hasta formar pasillos y callejones. Estos callejones pueden llegar a unirse formando un paisaje laberíntico como el que podemos ver en Las Majadas. En algunas zonas, la erosión ha hecho desaparecer casi por completo las rocas, quedando algunos vestigios en forma de monolitos aislados.
Visita a Los Callejones
La visita a Los Callejones de Las Majadas es libre y gratuita, y se puede realizar a cualquier hora del día.
A escasos metros de las primeras piedras del complejo hay un pequeño aparcamiento desde donde comienza una ruta señalizada de 3,6 kilómetros, apta para todos los públicos, y que se puede recorrer cómodamente en una hora y media.
A lo largo de un agradable paseo veremos, elevadas sobre el terreno, rocas que insinúan la forma de puertas, arcos, animales… En algunos tramos, llegan a forman los mencionados estrechos y laberínticos corredores, lo que, sin duda, ha servido para denominar a este singular espacio como Los Callejones.
Además, en el recorrido encontraremos carteles informativos en los que se pone en valor la flora, la fauna y las principales características del paisaje de esta zona del Parque Natural de la Serranía de Cuenca.
Conviene recordar que en la zona no está permitida la escalada.
Además de su interés geomórfico, Los Callejones de Las Majadas son también un espacio natural de película, puesto que sirvieron de escenario para algunas de las escenas de la película El mundo nunca es suficiente, uno de los films de la saga de James Bond protagonizada por Pierce Brosnan. El rodaje de la película en 1999 rompió la habitual tranquilidad de la comarca, pero contribuyó a difundir un espacio natural de gran belleza.
Los Miradores
Muy cerca de Los Callejones, es posible visitar la zona conocida como Los Miradores, un sorprendente balcón natural con unas impresionantes vistas sobre la hoz del Júcar. Allí, las altas rocas calizas que sirven de soporte a los miradores son también el resguardo para los buitres, lo que hace posible verlos volar a muy pocos metros.
Como siempre, no dudes en solicitar en la recepción del Hotel Plaza cualquier información que necesites para visitar esta zona de la Serranía de Cuenca.
Para conocer más en profundidad este tesoro, os dejamos un enlace a un video con un reportaje de que realizó Castilla-La Mancha Televisión sobre esta zona: Los Callejones de las Majadas.
¡Feliz visita!
